1) Por lo llamativo, al menos para mí, de algunos de los cambios propuestos. Sin ir más lejos, la plaza que yo ocupo en este momento no existe en el modelo que se quiere implantar.
2) Porque creo que puede ser de interés para quienes estén en otros centros, para ver qué tendencias de gestión de personal son las que se cuecen en algunas universidades.
3) Porque me encantará compartir con ustedes las reflexiones que me suscita este nuevo esquema. Los iré haciendo en próximos posts. Adelanto, ya, que me parece que es injusto para con muchas personas y que, creo, tiene un punto de suicidio institucional. Desarrollaré estas ideas en próximos días.
(Acuerdo del Consejo de Gobierno de 20 de diciembre de 2006)
Introducción
En el futuro inmediato, la UAB tendrá que afrontar un proceso importante de relevo generacional del profesorado. Probablemente será el cambio estratégico más importante de la institución; así, al menos, nos lo ha señalado la European University Association en la evaluación reciente de la que ha sido objeto nuestra universidad. Una renovación que ya se ha iniciado y que se acelerará en los próximos años. En este proceso, la incorporación de nuevo profesorado es el elemento clave para llevar a cabo un relevo planificado y que garantice un grado máximo de calidad en la docencia y en la investigación.
La UAB, que ha defendido tradicionalmente un modelo de universidad pública de calidad, científica, democrática y comprometida, no puedo apotar una actitud pasiva frente al nuevo escensario y ha de afrontar con rigor y decisión el desafio que supone la incorporación de nuevos profesores. En particular, hace falta adoptar nuevas medidas en la politica de profesorado que, teniendo en cuenta los antecedentes y la situación actual de la plantilla de la UAB, corrijan sus puntos débiles y la preparen para afrontar los retos futuros con las máximas garantías.
En coherencia, este documento explicata unos objetivos y finalidades generales para empezar un proceso progresivo, que durará al menos hasta el curso 2009-2010. La finalidad última es dotarse, como universidad, de objetivos y líneas de actuación que permitan definir una cerrera docente realista, que no hipoteque nuestro futuro y que sea suficientemente atractiva como para incorporar a la UAB a los mejores talentos académicos, para poder así competir en calidad y excelencia con otros centros académicos. Dicho de otra manera, para asegurar que mantendremos y mejoraremos nuestra situación presente, teniendo en cuenta que la generación que ha comenzado a retirarse, la de los fundadores de la UAB, deja nuestra universidad en un lugar privilegiado dentro de las universidades del estado español. Hace falta, pues, hacer lo posible para asegurar la continuidad de este legado.
Concretamente, los objetivos y finalidades básicos de las líneas futuras del profesorado, presentadas y aprobadas dentro del informe del rector al Claustro del 28/11/06, son:
- Reducir la duración de la carrera docente, evitando que la estabilización del profesorado se haga a edades muy elevadas.
- Promover una carrera docente e investigadora en la que haya una clara separación en dos etapas del personal en formación. La primera etapa, de inicio a la investigación, lleva la consecución de la tesis doctoral. La segunda está destinada a la consolidación de personal académica permanente. La Figura 1 muestra el esquema del nuevo modelo de carrera docente/investigadora.
- Reducir la dedicación docente del personal en formación, evitando el uso de places que conllevan muy carga docente. Los ayudantes de la UAB tienen la dedicación docente más alta entre las universidades catalanas: 21 créditos (según acuerda el documento de claustro sobre el profesorado de la UAB de 1998), frente a las 4 de la UdL, los 12 de la UPC, los 6 de la UdG, la UPF entre 6 y 8, y la URV que ha transformado las plazas en becarios; por lo que respecta a la UB tiene establecido un mínimo de créditos a importar de 12.
- Unificar la figura y categoría de personal en etapa de formación, lo que implica eliminar las distinciones actuales entre ayudantes y becarios. Cabe recordar que estas dos figuras tienen el mismo objetivo formativo (consecución de la tesis doctoral), pero las condiciones de trabajo son distintas.
- Eliminar, de acuerdo con la normativa ya en vigor, el uso irregular de asociados. Como hemos dicho, es un imperativo legal derivado de la reforma de la LOU y del "Convenio colectivo del PDI laboral de las universidad públicas catalanas", pero se trata de ampliar su alcance. En otras palabras, se quiere erradicar también el uso de contratos de asociados para personal en formación.
- Promocionar y favorecer la realización de estancias posdoctorales en centros de excelencia, donde nuestros doctores puedan continuar su formación investigadora, y, por otro lado, ayudar a nuestros doctores a incorporarse laboralmente a la industria de acuerdo con su cualificación y expectativas. Ambas medidas quieren favorecer la carrera docente e investigadora del personal formado como doctor en la UAB, independientemente del lugar donde, en su fase de consolidación, puedan ejercer sus funciones académicas.
- Reducir la tendencia a la creciente contratación de personal formado exclusivamente en la UAB, potenciando la cultura de atraer talento de todas partes, abriendo el abanico de contratación a profesores lectores e investigadores externos, y, en suma, dando un peso significativo en la carrera docente a los doctores y doctoras que tengan una trayectoria posdoctoral de calidad fuera de la UAB.
- Continuar el uso de programas como el Ramón y Cajal, Beatriu de Pinós... para atraer jóvenes investigadores que puedan consolidarse posteriormente en plazas de profesor permanente en la universidad.
Figura 1. Carrera docente/investigadora en la UAB
Será para mí un placer y de gran ayuda escuchar las opiniones que tengan respecto a este documento.
Es estupendo que exista una programación así. Lástima que no todas las universidades así lo entiendan.
ResponderEliminarPara mi universidad, un profesor es alguien que da clase. 24 créditos al año. A los ayudantes no los quieren ni en pintura, que dan muy pocas clases y cobran casi lo mismo que un asociado.
Yo entré como asociado (en el retorcimiento habitual de la figura) y tras cinco años leí la tesis y tres más tarde (publicaciones mediante), me presenté a una plaza de Titular. Pero dí 24 créditos cada año hasta entonces. Y doy 24 ahora. De hecho, este año voy a dar 25,5 y nadie me va a pagar las horas extra ni me van a mandar una carta de agradecimiento.
Lo que es vergonzoso es lo de la chica que salía hace un par de meses en el Magazine dominical del grupo La Vanguardia que daba clases de psicología a tiempo parcial en la Universidad de Granada y la obligaban a darse de alta en autónomos (200 euros al mes de coste) para poder contratarla como "asociada". Claro, al ser autónoma, ya era una "profesional de reconocido prestigio" y, por tanto, susceptible de ser contratada como asociada.
Me gustaría añadir que cotizar cómo autónomo o estar dado de alta en la SS es un requisito que se exige en muchas Universidades para acceder a una plaza de asociado a tiempo parcial. Es más, hay muchos casos en los que el profesor asociado prefiere cotizar cómo autónomo - pagando de su bolsillo- antes que perder la oportunidad de optar a una plaza de este tipo. Con lo que al sueldo que gana hay que descontar lo que paga de autónomo, otros 200 euros.
ResponderEliminarComo decía un toreo 'hay gente pa tó'.
Entiendo que la figura del "asociado-LRU" ha sido utilizada de forma torticera durante años. Yo mismo, recién licenciado, fui contratado como asociado a tiempo parcial primero y a tiempo completo más adelante. Y no estaba trabajando en ninguna empresa (lo estaba pero dejé un trabajo para comenzar en la Universidad).
ResponderEliminarAhora bien, la realidad se impone crudamente a los deseos del legislador y no hay profesionales que deseen tener una responsabilidad horaria por un cuasi-salariucho-de-mierda. Sí. Porque los asociados a 3 horas cobraban en tiempos LRU unas 45.000 pesetas al mes. Ya pueden bajar la ceja. Hoy anda por las 90.000 que es más o menos digno pero si tienes en cuenta que para tres horas de clase a la semana les obligan a estar 4 horas adicionales de tutorías, un cálculo sencillo nos dice que, como mucho, se les paga a 3.000 pesetas/hora. Ya me dirán que profesional de reconocido prestigio trabaja por 18 euros/hora si una hora de mecánico en la Seat cuesta 35 euros. Ojo, estoy dando por supuesto que el incauto usa las horas de tutorías para preparar las clases, que es lo que suelen hacer, porque en caso contrario baja un poco el salario.
Si a eso le añadimos que los asociados suelen impartir la docencia más difícil, la de peor horario, o en distintos centros (son los últimos de la jerarquía y eligen -es un decir- los últimos), está claro que hay muy pocos asociados porque, en realidad, los profesionales tienen mejores cosas que hacer.
Por otro lado, el caso de la licenciada en psicología que está dispuesta a trabajar por 300 euros es una prueba más del fracaso de nuestro sistema universitario. Hemos creado licenciados sin autoestima, dispuestos a rebajarse y trabajar sin apenas contraprestación. Muy triste.
Una cosa es el discurso, que suena muy bien y otra la puesta en práctica. La nueva carrera académica que propone la UAB no es tan bonita como la pintan desde el rectorado de la UAB. De hecho muchos colectivos de la Universidad están en contra de algunas de estas medidas, ya que empeora aún más la situación de los que se encuentran más en precario. Desde la UAB están promoviendo becas predoctorales no competitivas, con una carga docente muy superior a de la figura de ayudante de la LOU. Lo que no dicen es que detrás de este bonito discurso se esconde también una importante reestructuración de personal. Pero la campaña de márqueting de la UAB es impecable, en eso sí que estoy de acuerdo. Os pego el manifiesto que respecto a la nueva carrera académica ha realizado la Asamblea Contra la Precariedad de la UAB,que aglutina a diferentes colectivos que trabajan en una situación precaria en la Autónoma. Está en marcha una recogida de firmas.
ResponderEliminar“LA UAB, UN BUEN SITIO PARA TRABAJAR ”
La precariedad hace tiempo que se ha convertido en la forma de gestión laboral habitual en la UAB en diferentes ámbitos que afectan al personal de servicios externos, al PAS, al profesorado no titular o al personal investigador. Así mismo, la nueva carrera académica y la política de personal que actualmente propone el rectorado, agravan aún más esta situación. Algunas de las consecuencias de esta política son que los contratos laborales de los ayudantes serán sustituidos progresivamente por becas; que ser formado en los estudios de tercer ciclo de la UAB se convertirá, paradoxalmente, en un obstáculo a la hora de acceder a plazas más estables y que las nuevas medidas afectaran sobretodo a los colectivos y personas que, a pesar de su bagaje y experiencia docente e investigadora, están en una situación más débil y tienen las peores condiciones laborales.
Por todas estas cuestiones, PEDIMOS:
1. Que el rectorado reconsidere sus posiciones y apueste por una política activa por unas condiciones de trabajo dignas para todo el personal de la UAB. Pedimos que escuche, negocie colectivamente (no de forma individual) y de manera transparente con todos los actores implicados unas medidas que se están imponiendo sin debate ni participación de la mayor parte de la comunidad universitaria.
2. Que se realice una convocatoria de ayudas a los estudios dignas, sin contraprestación laboral y que se convoquen los puestos de trabajo necesarios para cubrir las tareas que actualmente realizan los becarios/as de colaboración, como por ejemplo, en bibliotecas y aulas de informática.
3. Que todos los becarios/as por proyectos (Capítulo VI) que están desempeñando funciones laborales en departamentos y centros de investigación tengan un contrato de trabajo.
4. Que las becas predoctorales de personal investigador en formación convocadas por la UAB cumplan, como mínimo, el Real Decreto del Estatuto del Personal Investigador en Formación, que regula un máximo de 60 horas de docencia por año. Para garantizar la calidad docente, que se priorice la realización del doctorado y que la docencia únicamente se pueda realizar a partir de la obtención del DEA.
5. El mantenimiento de la figura de ayudante, contemplada y reconocida en la nueva Ley Orgánica de Universidades y en el convenio de Personal Docente e Investigador Laboral de las Universidades Públicas Catalanas. Tal como especifica la nueva LOU, debe asegurarse que su carga docente no supere las 60 horas anuales.
6. Que el profesorado que está en precario bajo la figura contractual de asociado irregular y bajo la figura de asociado de sustitución de manera crónica e inestable, pueda tener unas condiciones y un salario digno bajo unas figuras contractuales convenientes. Que las horas de docencia de sustitución estructurales sean convertidas en plazas fijas.
7. Que la exigencia o el mérito de haber estado dos años sin vinculación contractual para poder desarrollar la nueva carrera académica en la UAB, se acompañe de una convocatoria de ayudas que permita llevar a término esta desvinculación.
8. Hacer uso de la figura contractual de colaborador permanente, contemplada en los estatutos de la UAB y en la actual LLUC, como instrumento de reconversión colectiva de las actuales plazas de colaboradores temporales.
9. Que se acabe la carrera de obstáculos que suponen acreditaciones y concursos reiterados, que los profesores, lectores y agregados que hayan estado acreditados se puedan promocionar mediante un concurso interno de méritos.
10. Que se replantee la nueva carrera investigadora de una forma realista, teniendo en cuenta los costos vitales, familiares y sociales que ésta comporta y que se implementen medidas de conciliación de la vida personal, familiar y laboral.
POR UNA UNIVERSIDAD PÚBLICA, COMPROMETIDA Y DE CALIDAD, ECHEMOS LA PRECARIEDAD DE LA UAB.
Firma el manifiesto o envía tu adhesión con tu nombre, apellidos, DNI y lugar de trabajo a
precarietat-uab@moviments.net (más información en www.precarietatuab.net)